El Papa con corazón peruano

El Papa con corazón peruano
Papa León XIV.

El Perú tiene una arraigada conexión con los papas. «El papa es charapa», dijo Juan Pablo II cuando llegó a Iquitos en 1988, en su segunda visita al país incaico. El papa Francisco, el argentino, se declaró devoto del Señor de los Milagros, San Martín de Porres y Santa Rosa de Lima. Y León XIV, el nuevo sumo pontífice, es peruano de corazón, nacionalizado y hasta con DNI electrónico. Los 40 años que vivió en Perú lo han marcado.

Por: Gerardo Porras
Corresponsal Lima- Perú

Tanto es el cariño de Robert Prevost, el flamante papa, por nuestro país, que ha tenido a bien elegir a su secretario personal en el Vaticano al párroco peruano Edgar Rimaycuna, de Chiclayo, la ciudad donde fue obispo y a la que saludó el día de su elección. Alguna vez, incluso, llegó a decir: «Chicago, Chiclayo… ¿Qué diferencia hay? Una sola letra». Hacía alusión, con esa ironía sana que tienen los curas buenos, a la ciudad de Estados Unidos en la cual nació, y a la provincia lambayecana que lo acogió y le prodigó respeto, admiración y gratitud.

El papa León XIV, en la misa de inicio de pontificado en la plaza de San Pedro, que congregó a más de 150 mil personas, pronunció frases que dicen de su humildad y bondad, virtudes que le han hecho ganar simpatías hasta de muchos agnósticos en Perú: “Fui elegido sin ningún mérito y, con temor y temblor, vengo a ustedes como un hermano que desea hacerse siervo de la fe y de la alegría”.

Luego de la ceremonia recibió el saludo de los invitados y el orden de ingreso de las delegaciones también confirmó su cercanía con su segunda patria: Italia -por ser prácticamente la anfitriona-, Perú -país del que obtuvo la nacionalidad en 2015—, Estados Unidos —donde nació en 1955— y España, que tiene un Corazón de Jesús en su bandera como símbolo de devoción religiosa.

El saludo de la delegación italiana, que fue la más numerosa, le permitió a León XIV encontrarse por primera vez con el presidente Sergio Mattarella. Luego fue el turno de la comitiva estadounidense, encabezada por el vicepresidente JD Vance y el secretario de Estado, Marco Rubio. La presidenta peruana, Dina Boluarte, le obsequió una Cruz de Motupe como símbolo de fe del pueblo peruano y con el claro propósito de estrechar los lazos diplomáticos y espirituales entre el Perú y la Santa Sede. La también llamada Cruz de Chalpón es un venerado madero revestido de oro y plata que se encuentra en Motupe, distrito de Lambayeque, al que también pertenece la provincia de Chiclayo.

Los reyes de España, Felipe VI y Letizia, quienes fueron los cuartos en saludar a León XIV, al pertenecer a una monarquía, le extendieron su “felicitación y mejores deseos en nombre del pueblo español, del Gobierno y de la Familia Real para un venturoso pontificado”. Además, le dijeron que esperan verle pronto en España.

Así, el sumo pontífice recibió a más de 150 delegaciones, entre ellas, además, al presidente de Ucrania, Volodímir Zelensky, y los representantes de Bélgica, Emiratos Árabes, Argentina y Brasil.

Mientras esto ocurría en la Santa Sede, Chiclayo era una fiesta de alegría y fe con misa, vigilia y danzas típicas. Las autoridades se han propuesto colocar una efigie del papa León XIV en la rotonda del parque principal frente a la catedral, construir un óvalo papal y convertir la vía de acceso al aeropuerto en el “Pasaje de la Cristiandad”. Y ya están preparando la bienvenida que le darán al papa cuando los visite.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *